Puesto: Alcalde Tiempo en el puesto: 8 años Partido con el que se reelige: UNE
Puesto: Alcalde Tiempo en el puesto: 8 años Partido con el que se reelige: UNE
José Enrique Arredondo Amaya, alcalde de Nueva Santa Rosa que busca un tercer mandato, se ha librado de varias denuncias. A inicios de 2015, cuando no había completado su segundo periodo, lo señalaron por violación en grado de tentativa. Ese mismo año, en octubre, se remitieron al Organismo Judicial otras cuatro solicitudes de antejuicio. Sin embargo, ninguna de estas peticiones prosperó.
De las denuncias presentadas en su contra, Arredondo Amaya dice que son “argucias” de sus opositores, las cuales afirma han quedado aclaradas. “Son espurias y políticas” argumenta, sin dar más detalles.
Ojoconmipisto solicitó información de estos casos al Ministerio Público, pero la administración de la fiscal general, Consuelo Porras, reservó estos datos. No obstante que antes era pública, ahora indica que se requiere el consentimiento del sindicado para tener acceso al detalle de denuncias de los funcionarios públicos.
La última auditoría gubernamental, presentada en mayo de 2019, señala que al alcalde se le impusieron dos multas por el monto total de Q5,090.28 por no ordenar el adecuado registro de contratos laborales e incumplir las recomendaciones de una auditoría anterior, para actualizar los datos de los proyectos municipales en el Sistema Nacional de Información Pública.
Arredondo Amaya también intentó desplazar a Edwin Escobar, alcalde de Villa Nueva, de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam) en enero de 2018. La suya fue la única planilla opositora, pero solo obtuvo 98 de los 313 votos. En esa ocasión, el jefe edil de Nueva Santa Rosa contó con el apoyo del expresidente Alfonso Portillo.
Arredondo Amaya tiene 53 años y antes de convertirse en jefe municipal era comerciante. A su nombre aparecen una chicharronera, una venta de repuestos para vehículos y una empresa denominada Moda 2000. Ninguna ha sido proveedora del Estado.
El alcalde dice que su meta es completar tres periodos al frente de la comuna, porque su plan de trabajo abarca tres fases de cuatro años cada una. De sus primeras dos gestiones destaca haber construido el parque municipal, reparar “el 85%” de las escuelas y cubrir el pago de maestros. En Guatecompras aparecen varias inversiones para edificación de escuelas, reparación de caminos y, entre otros, dotación y construcción de sistemas de agua.
El comité cívico El Sombrero tuvo un solo éxito electoral en Nueva Santa Rosa, municipio del departamento de Santa Rosa (al sudeste del país). Ocurrió en 2011, cuando José Enrique Arredondo Amaya ganó la alcaldía y superó en votos a sus oponentes de ocho partidos políticos. Entre ellos, el del Partido Patriota (PP), agrupación que ese año llevó a la presidencia a Otto Pérez Molina.
Sin embargo, ese logro fue fugaz. Los comités cívicos quedan disueltos después de las elecciones municipales, así que cuando Arredondo preparaba su reelección optó por el partido Libertad Democrática Renovada (Lider). Otro grupo político que, al igual que el PP, se desmoronó por el peso de las investigaciones de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) y la Fiscalía Especial contra la Corrupción (Feci).
Arredondo Amaya se lamenta de su decisión en 2015. “Seis meses antes de las elecciones todos decíamos que (Manuel) Baldizón iba a ganar, pero cuando faltaban dos meses (para las elecciones) todos hubiéramos querido salir huyendo porque las cosas estaban mal”, recuerda. No obstante, logró arrasar en las mesas electorales al conseguir el 54% de los votos emitidos.
Lider consiguió 171 alcaldías de las 338 en disputa ese año. En julio de 2016 quedó cancelado. Eso llevó a Arredondo Amaya a rendirse ante otro partido tradicional y ahora está inscrito con la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
Esta es la tercera vez que Arredondo se postula a la alcaldía. Y si gana, sería la segunda ocasión que la UNE dirige el gobierno municipal en Nueva Santa Rosa. En el periodo 2008-2012, gobernó con Maynor Sarbelio Salazar Carías, quien no logró ser reelecto y ahora este busca volver a la comuna con el partido Unionista.
Como justificación ante su versatilidad política, el alcalde Arredondo Amaya dice que todo tiene que ver con la necesidad del apoyo del presidenciable para gestionar y realizar las obras millonarias que planea para su municipio. Y, en términos prácticos, la facilidad que le trae el postular por un símbolo que ya está posicionado entre el electorado.
“Mire cuántos partidos hay y cuántos símbolos y candidatos que la gente no conoce. Con los cambios a la Ley Electoral y de Partidos Políticos hay ventajas para los que ya han participado y desventajas para los nuevos. Porque un alcalde que busca la reelección tiene más posibilidades y aunque les guste o no les guste, la UNE es más conocido y se va a evitar trabajo metiendo el símbolo”, expone.
Así que si Sandra Torres gana la presidencia, “definitivamente estando en una línea, (ella) me tendría que apoyar”, dice contundente el alcalde.
Arredondo, que sostiene su rechazo a la minería, tendrá que competir esta vez en contra de 10 candidatos. Si vuelve a quedar, ofrece construir una ciudad deportiva. Con piscina olímpica, canchas para diversas disciplinas, pista de atletismo y un estadio. Una obra que le obligará a endeudarse por Q13 o Q18 millones.
José Enrique Arredondo Amaya logró un tercer periodo, obtuvo el 54.94 por ciento de los votos.