Las islas que Eta e Iota dejaron en Alta Verapaz

18 diciembre 2020

Colonias, aldeas y caseríos de Cobán y San Pedro Carchá, Alta Verapaz, permanecen incomunicados porque el agua todavía no vuelve a su nivel.

La aldeas Sonté, Sanimtaca y Chaxucub, de Cobán, Alta Verapaz, permanece inundadas a más de un mes de las tormentas. Foto: Gabriel González.

 

Por Haydeé Archila

 

Hace 40 días desde que las tormentas Eta e Iota azotaron al departamento de Alta Verapaz. Aunque las lluvias cesaron, en varias localidades el agua desciende lento, pero en otras ni eso. En las colonias Austria e Israel; aldeas Sonté, Sanimtaca y Chaxucub, de Cobán, Alta Verapaz; y las aldeas Campur, Sesajal o Chibut, en San Pedro Carchá, siguen sumergidas.

Carlos Daniel Caal, jefe del departamento de investigación y servicios hídricos del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala (Insivumeh), explicó que influyen factores que van desde la saturación del suelo, el tipo de roca, la actividad kárstica del área hasta las aguas subterráneas.

“Es probable que hayan rellenado para construir. Echaron cemento en muchas depresiones que servían como drenaje natural. Entonces, al cambiar el uso del suelo modificaron su permeabilidad”, explicó.  La situación de Sesajal es aún más grave que la de Campur, asegura el experto, quien recientemente hizo una visita al lugar. “El espacio afectado se extiende hasta 6 kilómetros, en el eje más largo. En las áreas de Cobán influyen los drenajes, que no son suficientes”, agrega.

 

Lo perdieron todo

Sirio de Nes, presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo Urbano y Rural (Cocode) de la colonia Israel, donde el agua se resiste a bajar, afecta a más de 40 familias, coincide con Caal respecto a que parte del problema es que no cuentan con drenajes domiciliares ni de aguas pluviales. La situación fue latente cuando, tras la tormenta, la municipalidad cobanera envió tractores, pero no pudieron entrar debido a que los accesos estaban anegados por el agua.

“En estos días el sol nos ha ayudado para poder extraer la mayoría de sedimento y basura”, dijo. De Nes agrega que el problema se repetirá si no se buscan soluciones, por lo que están en conversaciones con Leonel Chacón, alcalde de Cobán, quien le prometió realizar un plan piloto.  “Queremos que nos apoyen para realizar estudios en la zona y dragar. Junto con vecinos de colonia W, residenciales Imperial y La Libertad, por mencionar algunos, nos organizamos como movimiento ciudadano para que esta petición se realice. Ya tenemos visibilizados varios puntos, uno en la salida de Coban hacia Guatemala, que ha sido cuello de botella y necesitamos destapar ese embudo”, indicó De Nes.

Don't miss out!

¡No te quedes sin enterarte!

Recibe en tu correo nuestro boletín mensual con datos, análisis y fiscalización sobre las alcaldías.

Invalid email address

Se intentó conocer la opinión del alcalde Chacón a través de su asistente, pero al cierre de esta nota no hubo respuesta.

 

Sesajal, 80 metros bajo el agua

En esa misma situación se encuentran 167 familias, de un total de 276, que permanecen en albergues, alejados de su hogar y sin trabajo. Se trata de los vecinos de la aldea Sesajal que fue inundada casi en su totalidad por Eta e Iota, desde el 4 de noviembre.

El agua subió 80 metros y solo ha bajado un metro en 15 días.  “Perdimos mazorcas, utensilios de cocina, animales domésticos. Ahora la comunidad vive en albergues ubicados en Cambayal, Semuy La Cuchilla, Centro de Salud de Sesajal y en el Centro Bautista Carismático; otros se hospedan con vecinos que no fueron afectados”, dijo Santiago Quib Chub, presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode) de la aldea Sesajal, San Pedro Carchá. Además de no tener trabajo, las personas duermen en la tierra, porque no hay piso de concreto, solo cuentan con sábanas, sacos o nylon.

Según Quib lo que más necesitan son alimentos, porque no pueden salir a comprar, ya que la comunidad quedó como “una isla”, en la que no hay acceso para entrar o salir. Para recibir cada donativo, Quib debe caminar durante horas hasta donde lo permite la carretera. “Nos han dado víveres por parte de la municipalidad, así como de comunidades vecinas, pero no es suficiente porque hay familias de hasta ocho integrantes”. Solicita medicamentos para enfermedades comunes como fiebre, tos y dolor de cabeza; mascarillas para prevenir la COVID-19.  Pero lo más importante, dice, necesitan recuperar sus viviendas y terrenos para poder sembrar. “Es lo que planteamos al señor alcalde (Winter Coc). Necesitamos que la municipalidad o el Gobierno central nos apoyen con un terreno en un área diferente, porque si no, volverá a pasarnos lo mismo”, enfatiza Quib.

 

La primera casa entregada en la aldea Chiquixji, San Pedro Carchá, Foto: Municipalidad San Pedro Carcha.

 

Ayuda por llegar

Winter Coc BA, alcalde de San Pedro Carchá, trabaja en la reconstrucción de las áreas afectadas, con 161 viviendas para Sesajal; 81 para Chibut y 500 distribuidas en diferentes aldeas. En Campur serán 950 casas. “Hemos reunido blocks y láminas, pero esperamos que llegue más ayuda”, comenta Coc. Ya adjudicó una vivienda en la aldea Chionon, en Chiquixji, y el martes 22 de diciembre realizará más entregas.

“Gestionamos qué hacer por ellos, incluso se analizan terrenos para el plan de reubicación en áreas de Sacanilla, Chibut y Campur. Sin embargo, nos enfrentamos a la situación de que los damnificados no quieren abandonar sus comunidades. El señor alcalde está buscando el apoyo porque sí es mucha perdida. Pero la ayuda no se encuentra de la noche a la mañana, todo es un proceso. Lo estamos tratando entre concejales, porque solo la municipalidad no puede”, agregó Paola Maribel Sacbá, concejal quinto de la municipalidad de San Pedro Carchá.

 

También puedes leer: Reparación de caminos, el mayor gasto de las municipalidades después de Eta e Iota