Municipios fronterizos no fueron advertidos por autoridades guatemaltecas del paso de la caravana, no hubo estrategia para recibirlos.
Por Claudia Palma
De la caravana que salió hace dos días de Honduras, un grupo llegó a la aldea Cadenas, de San Luis, Petén, donde miembros del Ejército intentaron impedir su marcha hacia la frontera El Ceibo.
Este es uno de los 23 municipios limítrofes entre Guatemala y México, según el Consejo Nacional de Atención al Migrante (Conamigua), además, tres de los cruces entre Belice y México. Las conversaciones con alcaldes situados en puntos fronterizos corroboran que no hubo ninguna estrategia previa de las autoridades guatemaltecas.
Cada día, por la frontera de Agua Caliente transitan un centenar de hondureños y ha habido ocasiones en que hasta 250, aseguró el alcalde de Esquipulas, Chiquimula, Carlos José Lapola Rodríguez.
“Siempre hemos sido un puente permanente de migrantes. Hay puestos de control, uno de Salud en el que se hacen las pruebas de COVID-19 a todo el que pasa por la frontera, pero existen muchos puntos ciegos que las autoridades no toman en cuenta. El municipio está en rojo, por fortuna para nosotros la caravana esta vez tomó otro camino”, dijo el jefe edil.
Pero esta información no ha llegado a los jefes ediles, aseguran los consultados.
“Tenemos buenos contactos en la frontera y mucha mejor información de Honduras que de las autoridades de Guatemala. Supimos que de la posibilidad de que la caravana pasara por Agua Caliente o Entre Ríos, en Izabal, y así fue eligieron Izabal”, agregó el alcalde.
Alejandra Mena, vocera del Instituto de Migración, desmintió que no se haya hecho un trabajo de planificación. “El director realizó coordinaciones con gobernadores de Zacapa, Chiquimula y se buscan comunicaciones con Petén y San Marcos. La intención es atenderlos a todos de manera integral, estamos coordinando con alrededor de 40 instituciones el paso de la caravana”, puntualizó.
El alcalde de Camotán, Rolando Guerra Guerra, sabe que no están libre del paso de una caravana de migrantes. Este viernes 2 de octubre “hay tres puestos de control policía”, indicó. Al momento de la conversación telefónica se encontraba en la frontera de El Florido que hace conexión con Honduras.
“En una aglomeración no se puede detener a nadie, aunque intentemos tomar cualquier medida, la gente siempre hará uso de la fuerza para pasar. No nos habían advertido”, dijo Guerra Guerra.
Guatemala linda con los estados mexicanos de Campeche, Tabasco, Chiapas y Quintana Roo. Eustaquio Rubén Méndez de León, Alcalde Ayutla, San Marcos, cercano a la frontera de Tecún Umán, no tiene empacho en admitirlo: “Siento una gran tranquilidad de ver al Ejército de México al otro lado del río (Suchiate). Hay todo un cordón de seguridad a la orilla”. En eso descansa su alivio.
De los consultados, fue el único que participó en una mesa de diálogo relacionada con el tema de la caravana. “Han llegado grupos, pero sabemos que se están desviando a las fronteras de Petén y Huehuetenango”, refirió.
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