Cinco municipios de Huehuetenango, Alta Verapaz y Quiché están entre los peor evaluados en un estudio de Fundesa. Lo atribuyen a falta de transparencia y pugnas por hidroeléctricas.
Por José Pablo del Águila
La Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa) midió el Índice de Competitividad Local (ICL) en 333 municipios. Destacaron a los 20 mejor colocados, pero los resultados también mostraron a los cinco últimos de la fila: Senahú, Alta Verapaz; San Miguel Acatán, Huehuetenango; Chajul, Quiché y Santa Cruz Barillas y San Mateo Ixtatán, de Huehuetenango.
Estas localidades tuvieron baja puntuación al medir a sus instituciones, infraestructura, desarrollo de las tecnologías de comunicación, economía, salud, fuerza laboral, educación, inversión y cobertura bancaria, entre otros.
Ariel Leal, alcalde electo de Senahú, considera que la corrupción y la contratación de personal poco capacitado para realizar tareas clave son las causas por las que su municipio salió mal evaluado. “Yo no le voy a decir que hay una sola ruta. Sin embargo, lo primero que tenemos que hacer es eliminar los focos de corrupción que hay en la municipalidad”, reconoce. Pero el ICL no midió percepción de la corrupción.
Manolo Ordóñez, activista de derechos humanos en Huehuetenango, considera que la conflictividad local por proyectos hidroeléctricos ha estancado el desarrollo. Hay una ausencia de las instituciones del Estado ya que hay pocos Juzgados de Paz y una pobre presencia de la Policía Nacional Civil.
La ruta para solucionar el problema es instaurar mesas de diálogo que permitan generar acuerdos, explica.
Sin embargo, no todos los indicadores son negativos. Tres municipios no reportaron homicidios en 2018: Chajul, San Miguel Acatán y Barillas. Mientras que Senahú tuvo 2.7 homicidios por cada 100 mil habitantes e Ixtatán, 13.5, según datos de la organización Diálogos.
Sin portal
Solo las Municipalidades de Senahú y San Miguel Acatán tienen un portal electrónico donde publica información pública de oficio que ordena la Ley de Acceso a la Información Pública. Es así que se puede ver que el sueldo del alcalde del primero, José Domingo García, es de Q20 mil y del segundo, Q8 mil, pero recibe más en dietas, viáticos y bonificaciones, Q17 mil 242, según reporte de Julio del año pasado.
Del resto de alcaldes no hay información porque no cuentan con portal electrónico.
Violeta Mazariegos, encargada de la Secretaría de Acceso a la Información Pública (Secai) de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), cuenta que ellos pueden establecer un comportamiento lesivo o que hay una violación al derecho de información.
En ocasiones anteriores, la Contraloría General de Cuentas ha emitido sanciones, dice. La PDH también puede interponer denuncias, pero es el Ministerio Público el encargado de darle seguimiento.
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