La alcaldía no publicó documentos sobre la ejecución de trabajos. La Contraloría tampoco reparó sobre el tema.
Por Isaías Morales
El 9 de septiembre pasado, la alcaldía de Amatitlán entregó a los vecinos de las colonias el Progreso 1 y 2 un muro de gaviones que sirve como vertedero para las aguas servidas y desfogue de aguas pluviales no inunden las casas. Este proyecto está finalizado y costó casi Q2 millones.
Hasta aquí todo bien, excepto que la municipalidad no publicó ningún documento después de que la alcaldía adjudicara el concurso (NOG 677604) a la constructora Confude, el 7 de diciembre de 2017. Tampoco difundió en Guatecompras la dirección electrónica donde se debía observar la transmisión en vivo de los trabajos. Sí proporcionó a Ojoconmipisto un enlace, pero este nunca funcionó.
El jefe de Información Pública, Álvaro Mejía, indicó que el link dejó de funcionar cuando concluyó la obra, pero que sí se publicó en el portal de contrataciones del Estado. Al indicarle que esto no sucedió, recomendó consultar al director de planificación Boris Vielman, pero él no respondió las llamadas.
La alcaldía también admitió que no posee un registro fotográfico y de videos de las grabaciones sobre cómo se construyó la obra. Mejía indicó que estos archivos los posee la empresa.
Esto recuerda el caso de la municipalidad capitalina que dejó en manos de la constructora esta responsabilidad durante los nueve meses que duró el contrato del Munitec-18.
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La comuna tampoco divulgó documentos sobre avances de los trabajos en los portales de Guatecompras y Segeplan. El primero se encarga de registrar la adjudicación, firma del contrato y fianza, adendas y cambios renglones de trabajo. Mientras el segundo reporta el avance físico y financiero.
Amatitlán descuidó estos reportes. Ojoconmipisto monitoreó el proyecto a través de solicitudes de información pública, la alcaldía respondió cada mes en los plazos establecidos en la ley.
Transparentar cómo se ejecutan una construcción es obligatorio para las municipalidades y todas las instituciones públicas. En 2014, el ministerio de Finanzas publicó un acuerdo donde ordenó divulgar 31 puntos en cada obra contratada, entre estos los estudios de planificación hasta que se liquida el contrato.
El artículo 79 de la Ley del Presupuesto 2017 (vigente para 2018) también contempla esta medida y detalla que cada gobierno local los primeros diez días de cada mes para actualizar en Segeplan la información sobre cómo avanzan los proyectos. Esta medida está vigente para 2019.
El uso de cámaras también es obligatorio (artículo 80). Esta norma regula que las alcaldías deben velar para que la constructora instale el circuito cerrado, transmita y solicite la publicación del IP o enlace en Guatecompras. También contempla que la empresa tenga el historial de al menos un mes de grabación.
Sin embargo, no prevé una sanción específica en caso de algún incumplimiento. La Contraloría General de Cuentas no reportó la falta de transparencia entre sus hallazgos de Auditoría al Presupuesto publicado en mayo. Para obtener explicaciones sobre ello, se intentó contactar a la directora de Gobiernos Locales Alma Raquel Villeda, pero no fue posible.
La falta de transparencia es una constante en las municipalidades. Un monitoreo de la iniciativa CoST concluyó el pasado 13 de noviembre que el 60 por ciento de las alcaldías cumple a medias con divulgar datos sobre las construcciones.
La alcaldesa Mara Marroquín, electa con la UNE, no dio explicaciones sobre por qué no se publicó esta información. No respondió las llamadas realizadas.
Este proyecto inaugurado hace tres meses pretende beneficiar a no menos de 82 mil vecinos de Amatitlán. La alcaldía presupuestó Q10 mil anuales para darle mantenimiento.
Esta nota es parte del proyecto «Obras bajo la lupa». Visite el especial aquí.
