Los indicadores de violencia no incluían a este municipio de Quiché en sus listas, tampoco estaba entre los 54 de mayor conflictividad electoral. Los incidentes de la noche del 16 de junio hicieron que este domingo se repitan las elecciones. Votarán para elegir presidente y alcalde.
Por Petronila Morales
Los vecinos de San Antonio Ilotentango, Quiché, no se consideran un poblado agresivo. De hecho, Diálogos, la organización que documenta casos de muertes violentas, en 2018 no reportó un solo caso en el municipio, y en 2017 solo uno.
Pero algo rompió esa normalidad el jueves 13 de junio, cuatro días antes de las Elecciones Generales. Un grupo de personas retuvieron un camión que transportaba víveres. Nadie habló de la procedencia ni el destino de este vehículo y su cargamento, porque además transportaba propaganda política. Tampoco mencionaron de qué partido. Aquello fue un preludio de lo que estaba por suceder.
El domingo 16 de junio, a eso de las 10:30 de la noche hubo inconformidad con los resultados preliminares: los pobladores tomaron los centros de votación, quemaron papeletas, quebraron vidrios del lugar y golpearon a miembros de las juntas receptoras de votos. Algunos de estos inmuebles hasta los rociaron con gasolina. “La Policía no de se dio abasto, todo fue un caos, corrimos para salvar nuestras vidas”, narró Juan Lux Yat, secretario de la Junta Electoral Municipal.
En San Antonio Ilotenango se inscribieron cuatro candidatos, pero la competencia real estuvo entre los postulados por la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y el partido Vamos. Es decir, entre el actual alcalde Domingo Ajeatáz Chó y Juan Yat Morales.
Si el jefe edil logra reelegirse, sería su cuarto período. Este es el recorrido de agrupaciones políticas que le sirvieron para ganar elecciones anteriores a Ajeatáz Chó:
- Gana 2008 – 2012
- UNE-GANA 2012 – 2016
- Partido Patriota 2016 -2020
“La situación fue muy tensa, todos corrieron y otros prefirieron cerrar la puerta de su casa. Quemaron una ambulancia de la Municipalidad”, cuenta Dina Yolanda Pú Tiu, subdelegada municipal del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de San Antonio Ilotenango.
Algunos medios informaron que quemaron viviendas, una ferretería y la sede de la UNE. Cinco personas resultaron heridas. “A Dios gracias no hubo pérdidas humanas”, dijo Lux Yat.
Juana Soc Pú, oficial analista de la PDH, insiste en la tranquilidad que se vive en el municipio. “Es la primera vez que pasa algo como esto”. Es cierto, no aparece entre los 54 municipios con mayor conflictividad electoral. Debido a estos hechos probablemente su nombre se incluya en el nuevo mapa dentro de cuatro años.
CANDIDATOS:
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Domingo Ajeatáz Chó – UNE, actual alcalde
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Juan Yat Morales – Vamos
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Juan Cor Osorio – MLP
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Antonio Guillermo Xante Osorio – FCN
Los resultados de la discordia
Ilotenango es una voz de origen náhuatl que significa “cerro de los elotes”. Hasta hace algunos años sus pobladores se dedicaban a la crianza de ovejas y la producción de lana. Ahora se dedican a la agricultura y comercio. Sus indicadores de desarrollo humanos no son halagüeños, están por debajo de la línea de pobreza.
El municipio se conforma de 14 aldeas y 20 caseríos. Según proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) tiene 23 mil 633 habitantes, el 75 por ciento son indígenas, el idioma predominante es el k´iche´.
En San Antonio Ilotenango hay 12 mil 942 ciudadanos empadronados que votarán en 36 mesas. En estas votaciones todas estarán instaladas en el área urbana del municipio. Los vecinos votarán sobre una papeleta blanca y otra celeste, para elegir presidente y alcalde.
Previo a los disturbios de hace dos meses la noche del 16 de junio, habían procesado 20 mesas, los resultados favorecían a Ajeatáz Chó, el alcalde que busca su cuarta reelección.
Antonio Cho Simeón, concejal II, se refirió a que los problemas a partir de las inconformidades de otros partidos como Vamos que iba perdiendo.
El ambiente continúa tenso en el municipio, percibe Lux Yat. “Esta es una pelea entre la UNE y Vamos, los dos partidos que encabezan”.
Se conformó una mesa técnica de seguridad integrada por la Policía Nacional Civil (PNC), Gobernación Departamental, la Comisión Presidencial de Derechos Humanos (COPREDHE), la Secretaria de Inteligencia Estratégica del Estado (SIEE), Ejército, V Brigada, Policía Municipal de Tránsito y la PDH. “Su papel es garantizar la seguridad y los derechos ciudadanos, y su accionar culminará hasta concluidas las elecciones”, dijo Soc Pú, de la PDH.
Habrá presencial de la PNC, mas no indicaron de cuántos elementos para el domingo de elecciones.
El 5 de agosto entregaron a las JEM las 36 cajas en presencia de los fiscales titulares y suplentes de los partidos UNE y Vamos. Un día después capacitaron a las JRV en Santa Cruz del Quiché, donde participaron los presidentes, secretarios y vocales de mesa. La Junta Electoral Municipal será la misma que funcionó el 16 de junio.
Después de las elecciones los vecinos confían en que se restablezca la paz en que suelen llevar sus vidas. Mientras, planean cómo protegerse en caso de nuevos disturbios.
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